Te contamos 12 formas de crear un rincón de lectura en casa. 12 modos sencillos de disponer de un lugar perfecto para disfrutar del placer de la lectura. Sin complicaciones. Sin obras. Y sin tener que empeñar un riñón.
1.- Aprovechando el hueco de las escaleras. Si tienes una casa de dos plantas y el hueco de la escalera libre, éste puede ser un sitio perfecto para un rincón de lectura recogido y coqueto, y una forma estupenda de aprovechar ese espacio. Si es un hueco pequeño abierto hacia una zona ancha, bajo él puedes habilitar estantes para los libros y a su lado poner un sillón con una lámpara de lectura de pie. Si es un hueco grande y amplio, puedes poner un gran banco dentro con espacio para libros bajo él e iluminación cenital.
2.- Reconvertir una despensa en cuarto de lectura. Si tienes una despensa y no la le das uso, quizá puedas habilitar aquí tu rincón de lectura. El tamaño determinará el mejor modo de hacerlo, pero el que sea una estancia independiente es toda una ventaja.
3.- Un cuarto de la plancha convertido en biblioteca. Muchas casas, sobre todo de cierta antigüedad, siguen disponiendo de un cuarto de la plancha. Y a menudo no se usa como tal. Demasiado pequeño para un dormitorio y demasiado grande para una despensa, una buena idea es convertirla en biblioteca. Un sofá cómodo con espacio inferior para libros, buena iluminación cenital y todas las paredes con estantes de suelo a techo, podrían convertirlo en una biblioteca. Si además puedes habilitar una mesa plegable adosada a la pared bajo la ventana, mejor que mejor.
4.- Un rincón de lectura en un balcón cerrado. Si dispones de un balcón cerrado, tienes un lugar perfecto para un rincón de lectura; una pequeña alfombra, un asiento mullido, una lámpara de lectura al lado y una caja con los libros que quieras tener más a mano pueden ser más que suficientes. Si tienes niños aficionados a la lectura, también puedes poner unos pufs o cojines mullidos en el suelo para ellos.
5.- Un tipi casero como rincón de lectura infantil. Los tipis infantiles son económicos y los puedes montar en muchos sitios, empezando por el más obvio; su propio dormitorio. Una forma “aislada” de abstraerse para leer y fantasear a su antojo.
6.- Una rincón de lectura fantástico en tu propio dormitorio. Básicamente puede ser la versión adulta del tipi infantil. Puedes hacerlo con unos cojines amplios y mullidos en el suelo, una mosquitera que deje pasar la luz y puedas colgar holgadamente del techo, quizá unas guirnaldas de luces LED en la parte alta… Échale imaginación y disfruta.
7.- Aprovechar un pasillo ancho para crear un rincón de lectura. En un pasillo ancho, seguro que encuentras un lugar entre dos puertas para un asiento cómodo y una iluminación adecuada de pared (un flexo de luz adaptable, por ejemplo). Es una buena forma de no desaprovechar metros cuadrados. Además bajo el asiento puedes disponer de un cajón con ruedas para dejar tus libros favoritos a mano, o los que quieras empezar próximamente.
8.- Un rincón de lectura en un armario empotrado. Si, has leído bien. Un armario empotrado puede ser un perfecto rincon de lectura, una vez te deshagas de sus puertas. Puedes disponer de un banco en el interior y bajo él un estante con libros. Y, si es muy grande, disponer de algunas baldas estrechas más a los lados desde abajo hasta el techo.
9.- El descansillo de las escaleras convertido en rincón de lectura. Tenga ventana o dé al interior, si el descansillo de tus escaleras es ancho, puedes convertirlo fácilmente en un rincón de lectura cómodo y agradable. Lo principal e imprescinbible es un lugar para sentarte y una buena iluminación. Si dispone de ventana, una buena idea para solventar ambas cuestiones de una sola vez, es un banco bajo la misma. Si no dispones de ella, un sillón cómodo y una lámpara de pie serán lo más adecuado. Al ser un lugar de paso puede ser peligroso ubicar cajones con libros o muchos elementos, así que ten cuidado con ello; un estante estrecho fijo en la pared puede solucionarlo.
10.- Un rincón de lectura en la buhardilla. ¿Dispones de una buhardilla y no la usas salvo como trastero? Puedes convertirla en un rincón de lectura. Si es muy, muy baja, puedes disponer de una colchoneta y/o cojines en el suelo, y algunas cajas de madera para guardar libros, con una iluminación de leds en el techo. Si la caída del tejado es moderada, puedes poner un sofá o sillón y habilitarla igual que lo harías en otra estancia.
11.- Un estudio que es además un rincón de lectura. Si tienes espacio en tu estudio o despacho, un biombo puede separar la zona de trabajo del rincón de lectura. Tras él, te puede valer con lo mínimo imprescindible; un lugar cómodo para sentarte y una luz adaptable como iluminación. Además si el estudio sólo lo utilizas tú, puedes mover el biombo todo lo necesario para que la zona más amplia sea la de trabajo o la de lectura, según lo precises; para ése caso, elige un biombo ligero o con ruedas que puedas mover con facilidad.
12.- Un rincón de lectura ubicado en un salón. Suele ser el lugar menos recomendable de la casa, sobre todo para una familia, por aquello de que allí suele estar también el televisor, a veces consolas, y es un lugar ruidoso y concurrido. Pero si no dispones de más espacios en casa, un sillón apartado de la zona de televisión (quizá, simplemente, girado hacia la pared en lugar de con la espalda en la pared) con cascos de música a mano para aislarte del ruido y luz adecuada, pueden ser todo lo que necesites.
¿Cuál de ellos podría acercarse más a tu rincón de lectura ideal?
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