¿Sabes cómo cuidar el suelo pélvico para mantenerlo sano y fuerte y evitar problemas? Esta es una parte del cuerpo que a menudo no se tiene en cuenta al cuidar de la salud pese a su importancia. Un suelo pélvico en buen estado evita problemas como la incontinencia urinaria, mejora la satisfacción sexual y ayuda a evitar prolapso, entre otras ventajas. Por eso su cuidado es tan importante.
Esto es aún más relevante en la mujer embarazada y durante el post parto. Pero mantener un suelo pélvico fuerte es importante a cualquier edad. Además, situaciones como el aumento de peso significativo o la entrada en la edad madura hace que sea más vulnerable y, por tanto, más recomendable tomar medidas para cuidar el suelo pélvico.
Cómo cuidar el suelo pélvico: lo que debes saber
Hay un gran diversidad de medidas que te ayudan a cuidar el suelo pélvico. En unos casos, para reforzarlo. Pero también es conveniente conocer qué le afecta negativamente para evitarlo. Vamos a ver todo ello.
Haz ejercicio para fortalecer el suelo pélvico
Los llamados ejercicios de Kegel son ejercicios para el fortalecimiento pélvico. Son muy fáciles de realizar y puedes hacerlos cada día o varios días por semana durante unos minutos. Cada vez es más habitual encontrar también clases para mujeres en las que practicar ejercicios hipopresivos con aro y sin aro que ayudan a fortalecer la musculatura del suelo pélvico.
La mejor forma de aprender a hacerlos con ayuda de un fisioterapeuta ginecológico, de la matrona durante el post parto o de otro tipo de profesional de la salud especializado en este ámbito. Ten en cuenta que mal hechos puede suponer que fuerces esos músculos en lugar de ejercitarlos para que se fortalezcan.
Otros modos de fortalecer la musculatura de la zona
Hay algunos elementos de apoyo que ayudan a mantener el suelo pélvico en buen estado como son las bolas chinas o el cono vaginal. Si vas a utilizarlos infórmate en la farmacia o el lugar donde los adquieras de su forma de uso. También es buena decisión consultar con tu ginecólogo la idoneidad de su uso.
En algunos casos cuanto la musculatura de la zona está muy debilitada o dañada puede ser necesaria la ayuda profesional mediante técnicas de fisioterapia ginecológica. Es algo excepcional que la mayor parte de las personas no necesita y habitualmente es un profesional de la ginecología (o de la urología si se trata de un hombre) quien deriva a esto.
Cómo cuidar el suelo pélvico con buenos hábitos de vida
- En el baño, no inclines el cuerpo hacia adelante al orinar o defecar. Mantén la espalda recta y los pies en ángulo recto o, mejor aún, elevados sobre un pequeño escalón.
- No empujes con las abdominales para forzar la defecación. Si tienes problemas de estreñimiento
- No cargues peso en exceso.
- Realiza ejercicio físico de modo habitual, pero si estás en una situación de suelo pélvico débil sustituye el ejercicio de alto impacto pélvico por otro acorde a este momento y fortalece esta musculatura antes de recuperarlo.
¿Qué deportes son los mejores para cuidar el suelo pélvico?
El ejercicio físico de bajo impacto es el mejor cuando te planteas cómo cuidar el suelo pélvico. Los de alto impacto, no son recomendables si esta musculatura está dañada o debilitada.
- Natación.
- Aquagym específico para la mujer con ejercicios no agresivos para el suelo pélvico.
- Patinaje
- Senderismo o sencilamente caminar
- Marca nórdica
- Hipopresivos
- Pilates
- Surf
- Paddle surf
Consejos para la salud pélvica
- Procura mantener un peso corporal saludable.
- Sigue una alimentación saludable rica en fibra para evitar el estreñimiento crónico.
- Cuida tu vejiga y no orines sin ganas salvo en casos muy puntuales.
- Evita el impacto negativo sobre la musculatura del suelo pélvico al hacer ejercicio.
