Trucos para un dormitorio más confortable

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El dormitorio es para muchas personas algo más que la estancia en la que dormir. Sobre todo si es un dormitorio individual, se busca que sea un cuarto acogedor, cálido y cómodo. Te damos unos trucos para un dormitorio más confortable que te ayudarán a mejorar tu habitación para estar más a gusto en ella. Y no solo a la hora de acostarte.

Trucos para un dormitorio más confortable - El Jardín de Venus
Incluso con un espacio de formas extrañas con estos trucos puedes lograr un dormitorio acogedor y cómodo

Trucos para un dormitorio más confortable, cómo hacer que tu habitación sea más acogedora y cómoda.

Buena temperatura ambiental, clave para lograr un espacio confortable.

Si la temperatura de una habitación es demasiado calurosa o demasiado fría, es difícil que puedas sentirte cómoda y a gusto en ella. Así que el primero de los trucos para un dormitorio más confortable es mejorar su aislamiento térmico. Y conseguir una temperatura más agradable todo el año.

Hay soluciones de calefacción y climatización que puedes instalar. Pero previamente es mejor comenzar por lograr un buen aislamiento en la estancia. Si quieres lograrlo sin obras tendrás que usar elementos que te ayuden a mantener la temperatura interior y evitar corrientes de aire.

  • Las alfombras te ayudan a aislar el suelo.
  • Burletes en puertas y ventanas sin cierre hermético ayudan a evitar el paso del aire.
  • Los cabeceros grandes y acolchados y elementos como cuadros o tapices colgantes contribuyen al buen aislamiento de las paredes.
  • Estores o dobles cortinas también te pueden ayudar en este sentido.

Si buscas trucos para un dormitorio más confortable, usa ropa de cama y cojines de tacto agradable.

El tacto agradable ayuda a sentirse bien al acostarse. Pero también la temperatura que te interesa mantener durante la noche.

En los meses fríos usa ropa de cama que te proporcione calor. Por ejemplo, puedes usar juegos de sábanas de coralina y edredones nórdicos de plumas. Y en los meses cálidos, colchas livianas y sábanas más frescas.

Colchón y almohada cómodos y saludables.

La ergonomía es clave para el descanso nocturno. Y ambos esenciales para cuidar de la salud y el bienestar. ¿Cómo conseguir un dormitorio confortable? Eligiendo un colchón y almohada adecuados. Es una de las partes más importantes de un dormitorio así que no escatimes y si tienes un presupuesto bajo prioriza en esta cuestión.

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Pon tu toque personal para sentirte mejor. Plantas y cojines bonitos pueden marcar la diferencia.

Asientos ergonómicos más cómodos, trucos para un dormitorio más confortable.

En muchos dormitorios no puede faltar un asiento. Para descansar. Para calzarte. Para usar en un escritorio. Para leer. Sea para lo que sea es importante que si buscas confortabilidad elijas un modelo ergonómico que te ayude a cuidar de tu espalda incluso si lo usas muchas horas.

Orden y limpieza, claves para crear un dormitorio acogedor y cómodo.

No necesitarás obras pero sí un poquito de trabajo. Y es que uno de los más efectivos trucos para un dormitorio más confortable pasar por tenerlo limpio y ordenado.

Actualmente hay muchas soluciones de ordenación prácticas. Pero de poco sirven si luego dejas tiradas las cosas, no haces la cama y te olvidas de guardar cada cosa en su sitio.

Realmente la diferencia entre colgar una chaqueta en un armario y tirarla en la cama es de unos 30 segundos. Pero ni siquiera, porque como luego te estorbará la cambiarás de sitio varias veces. Así que al final trabajarás más para tener un cuarto desordenado, en el que resulte poco agradable estar.

En función del tipo de objetos que suelas tener, busca soluciones de almacenamiento adecuadas. No es lo mismo almacenar ropa, que zapatos o libros, por ejemplo.

Iluminación cálida para ver mejor.

Si te molesta a la vista, no es agradable. Así que una buena iluminación es esencial. En el dormitorio se prefiere la luz cálida. Una buena opción es instalar luces regulables, así la puedes adaptar a lo que necesites en cada momento. Poca luz si solo quieres levantarte por la noche sin tropezar o si vas a leer, por ejemplo.

Y, si es posible, aprovecha la luz natural que entre del exterior.

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Usa colores suaves que te hagan sentir bien

Haz un buen uso del espacio, otro de los trucos para un dormitorio más confortable.

Un dormitorio muy recargado es tan poco acogedor como un dormitorio excesivamente vacío. Por eso es importante hacer un buen uso del espacio.

El problema más habitual es que sea pequeño y cuesta solucionarlo, sobre todo si tienes que vivir en él y guardar en pocos metros cuadrados todas tus pertenencias. Sin hacer milagros, soluciones como las cajas o canapés para almacenar bajo la cama te pueden ayudar. También aprovechar los altillos. Puedes usar estantes hasta el techo en lugar de una simple mesilla para sacar más partido al espacio en altura. Y usar bancos o asientos con almacenamiento interior, entre otras posibilidades. E incluso instalar soluciones abatibles para el escritorio.

Si el problema es que es muy grande, valora crear una habitación suite.

Elige una paleta de colores coherente y armoniosa.

Porque te ayudará a sentirte mucho mejor en ese espacio. Sin distorsiones. Sin que la vista se canse.

Pon tu toque personal.

Estás en tu dormitorio. No dejes que sea de catálogo de tienda de muebles. Dale tu toque personal. ¿Te gustan las plantas, la fotografía, el macramé? Cualquier cosa que la haga tuya y te ayude a sentirte bien sin molestar en su uso te ayudará a lograr esa habitación confortable que quieres.

Con estos trucos para un dormitorio más confortable tienes más fácil crear un espacio acogedor en el que te sientas a gusto y bien.

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