Cómo convertir la cena de cada día en un momento especial

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cómo convertir la cena de cada día en un momento especial

A menudo, la hora de la cena es uno de los pocos momentos en que todos los miembros de la familia pueden estar compartiendo espacio en casa. En ocasiones ni siquiera ese momento respetan los complicados horarios laborales  de cada uno, pero si en tu caso si ocurre así, sea en pareja o en familia, aprovecha para convertir la cena de cada día en un momento especial y agradable que todos deseen que llegue.

Para lograrlo, aquí van unos consejos sencillos y efectivos.

* Pon la mesa bonita. No necesitas trabajar mucho ni emplear mucho tiempo, a veces es tan sencillo como poner en el centro de la misma unas flores o unas velas (aunque sea apagadas si va a haber niños a la mesa), puedes hacer que cada miembro de la familia se encargue un día de la semana (o una semana) de dar su toque especial, sea poner un vaso en el centro con unas flores silvestres, hacer un centro de mesa de pompones o de globos, poner una flor artificial dentro de una botella vacía o doblar las servilletas de diferentes formas, por ejemplo. Simplemente se trata de implicar a todos y hacerles partícipes de que es es un momento especial del día y que merece la pena dedicarle un par de minutos para el disfrute posterior de todos.

* Durante la cena, no se enciende la tele. Ni la radio. Si acaso algo de música de fondo y sólo en el caso de que a todos los que se sienten a la mesa les guste la misma, y siempre a un volumen en el que lo que prime sea la conversación, porque de eso es de lo que se trata, de que la cena se convierta en el momento en que compartir cómo nos ha ido el día, qué planes, proyectos o quehaceres tenemos para e día siguiente, cómo nos sentimos… 

* Prescinde del teléfono todo lo que puedas. Lo ideal sería dejar en silencio los teléfonos móviles, por su puesto fuera del comedor o cocina y el de casa descolgado el rato que dure la cena. Sólo en caso de estar esperando una llamada urgente y relevante saltar este punto. Unos minutos de desconectar no hacen daño a nadie y media hora después o el tiempo que dure la cena podemos contestar si se ha recibido alguna llamada o mensaje. Realmente, ¿en cuántas ocasiones, cuántos días del año, esperas a esa una hora una llamada tan urgente que no pueda esperar ni unos minutos?

* Procura que la cena sea saludable y sabrosa y que haya variedad entre unos días y otros. No necesariamente te dará más trabajo que realizar otro tipo de cenas;  hoy en día hay ensaladas frescas (en bolsa) que se pueden tener emplatadas y aliñadas en la mesa en dos minutos o menos. Con el horno o el microondas puedes tener listos platos deliciosos de carnes o pescados en cosa de minutos, trabajando y manchando menos que metiendo un producto precongelado a la freidora. Las cenas a base de fiambres variados pueden ser una buena opción un día por semana. La pasta fresca rellena y las salsas embotadas de calidad también pueden ser una buena opción para un día por semana.

* Procura evitar discusiones, polémicas y temas conflictivos durante la cena, ten mano derecha para realizar un quiebro si hace falta o deja claro que dicho tema se pospone hasta que se termine de cenar porque ese no es el momento de tratarlo.

* Siempre que se pueda, alarga la sobremesa. Sea en pareja o en familia, si el momento es agradable y divertido, sería estupendo alargarlo. Sobre todo en familia, propón una actividad conjunta antes de que al recoger la mesa haya desbandada general. Otra forma de alargar el momento de la cena es servir en lugar de un plato sustancioso dos más ligeros (ensalada y proteína o sopa y proteína, por ejemplo), que el postre se prepare al momento (una macedonia de fruta o fruta con yogur y frutos secos) y en la mesa o tomar el café, té, leche… en la mesa y no pasado un rato ya en el salón o el dormitorio.

* Para terminar bien y que nadie tenga la sensación de que carga con todo el trabajo, cada miembro de la familia debería encargarse de recoger sus cacharros y llevarlos al fregadero o lavavajillas. Según la edad de cada uno, lo ideal es que todos tengan responsabilidades como fregar, tirar la basura, limpiar la mesa… Y aprovechar a dejar todo preparado para el desayuno del día siguiente y que así las mañanas no sean un caos a carreras. 

 

Foto by Pixabay

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