Golpe de calor en perros qué es, cómo prevenir y cómo actuar

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El golpe de calor en perros es un problema propio del verano, aunque puede darse por diversas circunstancias en otros momentos del año. Es muy grave y puede ser letal si no se actúa con rapidez para evitarlo. Conoce cómo prevenirlo y el modo de actuar en el caso de que tu perro esté sufriendo un golpe de calor.

Golpe de calor en perros
Mia Anderson | Unsplash

Qué es el golpe de calor en perros y por qué es tan grave.

La temperatura corporal habitual de un perro sano es ligeramente superior a la de los seres humanos. Pero una temperatura superior a 40ºC es tan problemática en ellos como en los humanos. Además, solo expulsan sudor a través de la zona cercana a las pezuñas y esto complica que en un entorno de mucho calor puedan regular su temperatura corporal.

A medida que su temperatura corporal va aumentando se complican los problemas y al llegar a los 42ºC se determina que está sufriendo un golpe de calor.

El golpe de calor en perros implica taquicardias, vómitos, desorientación, pérdida de consciencia. Y, si no se pone remedio rápidamente para bajar su temperatura corporal sin shock térmico, puede ocasionar la muerte del animal.

Todo lo que necesitas saber sobre el golpe de calor en perros.

Cómo detectar que tu perro está sufriendo un golpe de calor.

Los síntomas principales del golpe de calor en perros comienzan por una temperatura corporal excesiva, entorno a los 42ºC y un jadeo persistente. Además, suele presentar taquicardias y la lengua se ve más oscura de lo habitual y pegajosa.

Otros síntomas frecuentes son la aparición de vómitos y diarreas unidos a los anteriores. Igualmente es frecuente que se muestre desorientado, que se tambalee y parezca estar a punto de perder la consciencia. E incluso que la haya perdido.

Estos son síntomas graves y al primer indicio o sospecha de que tu mascota está sufriendo un golpe de calor debes actuar con rapidez para bajar su temperatura corporal. Siempre sin llegar a provocar un shock térmico, pues esto también es problemático.

Cómo actuar cuando detectas que tu perro está sufriendo un golpe de calor.

El primer paso es tratar de trasladarle rápidamente a un ambiente fresco. Por ejemplo si es en la calle, acceder a un portal, un pórtico con sombra o un local comercial al que te permitan acceder. Si es en casa, a la estancia más fresca de la misma.

Si tienes a mano algo con lo que abanicar al perro, hazlo. Un cuaderno, una carpeta o incluso folletos publicitarios te pueden servir para ello. También es preciso que cuando antes humedezcas su cabeza para rebajar su temperatura corporal. Puedes hacerlo mojando un paño o una camiseta y poniendo esta sobre su cabeza. Nunca viertas agua helada sobre el perro porque puedes provocar un daño aún más grave por el contraste brusco de temperaturas.

Si estás en casa o en una zona en la que puedas bañarlo, hazlo. El agua debe ser fresca pero no fría y, por supuesto, nada de añadirle cubitos de hielo.

Como ocurre ante un golpe de calor en personas, a los perros también se les puede dar de beber agua siempre que estén conscientes. Es importante que esta no esté helada y que la beban a poquitos, sin darles una gran cantidad de una vez.

En cuanto sea posible traslada al perro a un veterinario de urgencia. Es importante que averigüe si ha sufrido daños orgánicos importantes y tome medidas inmediatas para revertir estos antes de que sea tarde.

Cómo prevenir el golpe de calor en el perro.

Para evitar todo lo anterior nada mejor que la prevención. Conocer qué puedes hacer para evitar que un golpe de calor afecte a tu perro es esencial para poder tomar medidas efectivas en este sentido.

Evita los esfuerzos en días y horas de mucho calor. Excursiones y paseos, mejor a primera y a última hora del día y en zonas con sombra. Además, lleva siempre agua contigo y ofrécesela con frecuencia.

En el coche, procura que reciba sombra cuando emprendes viaje con tu perro. Haz que la temperatura del vehículo sea apropiada para un viaje sin problemas ni para él, ni para ti. Utiliza el aire acondicionado o juega con las ventanillas para regular la temperatura del habitáculo.

Además, para con frecuencia para proporcionarle agua y nunca, bajo ningún concepto, le dejes solo cerrado en el coche un día de calor. Incluso aunque el cielo esté nublado; en pocos minutos puede asomar el sol y calentar con rapidez el coche subiendo la temperatura dentro de este de forma drástica.

En casa pon siempre a su disposición agua fresca. Y nunca le dejes en una terraza al sol sin que pueda acceder al interior cuando desee. No le dejes solo en casa en la terraza incluso con la puerta de acceso a casa abierta, pues un golpe de aire puede cerrarla.

Conocer estas cuestiones te ayudará a prevenir un golpe de calor en perros y a actuar adecuadamente en caso de que no hayas podido evitarlo. Sea para ayudar a tu mascota o a otra. Y recuerda que tener esto presente te puede ayudar a salvar vidas.

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